Cuando se inicia una relación matrimonial, regularmente se hace con mucha ilusión, y una gran cantidad de expectativas respecto del rol y comportamiento que nuestro partenaire tendrá en la relación, creencias que habrán de cumplirse puntualmente, y de conductas e intenciones que siempre coincidirán.

La realidad invariablemente confronta, y cuando el velo del enamoramiento declina, los problemas aparecen y resulta que caemos en cuenta que hay muchas (cuando no todas) cosas, que no son como se supone serían o podrían esperarse en la vida de pareja.

Al enamoramiento, la donación, el amor y la devoción, les sustituye la crítica, el desprecio, los vacíos emocionales, actitudes y conductas insanas.

“Todos llevamos dentro de la cabeza un modelo de la realidad que nos ha sido transmitido por la tradición, la formación, la costumbre y los prejuicios. Cuando los sucesos de la vida y la conducta de las personas a nuestro alrededor se ajustan a ese modelo, permanecemos tranquilos y nos parece que todo marcha bien. Pero cuando no se ajustan al modelo, nos alborotamos por dentro. El tal modelo, para colmo, es accidental y arbitrario. Cae en cuenta de eso, y nada volverá a trastornarte.”
Anthony De Mello

El problema es que nunca hemos recibido (quizá no hemos permitido que así suceda), la formación requerida para tener un sano inicio y generar un vínculo consciente, indispensable para una relación que necesariamente tendrá desgaste por los roces diarios, propios de la adaptación entre dos orígenes, historias y creencias distintas.

Una real preparación al matrimonio requeriría introyectar nuestra infancia y entender que tanto de nuestras actitudes, conductas y creencias aprendidas son de supervivencia a la familia de origen, que se necesitaría desechar antes de la conformación de una familia nuclear.

En el CAI te invitamos al taller de “La Raíz de nuestras Heridas Primaria”, en donde identificarás, enfrentarás y superarás las heridas que generan actitudes y conductas tóxicas para las nuevas relaciones, especialmente las de pareja.